

La región argentina de Tierra del Fuego se halla en el centro de una disputa de poder internacional. Dentro de las tensiones generadas por el advenimiento de un nuevo orden multipolar, dos bloques que representan a distintos sectores económicos se encuentran compitiendo para instalarse con megaproyectos en la zona austral argentina.
Por un lado se encuentra la iniciativa del Grupo Mirgor, el gigante local de artículos electrónicos controlado por Nicolás Caputo; mientras por el otro se presenta la empresa agroquímica de la provincia china de Shaanxi. Sin embargo, gracias a la gestión política y a una propuesta superadora, es la inversión proveniente de China la que cuenta en la actualidad con mayores probabilidades de concretarse.
En este escenario, la administración provincial de Tierra del Fuego ha consolidado el avance de la inversión mediante la firma de un memorándum de entendimiento con la Shaanxi Chemical Industry Group, celebrado el pasado 16 de agosto de 2022. Con la intervención del embajador Sabino Vaca Narvaja, la firma de este acuerdo adelantó rápidamente las gestiones para el desembarco de la empresa interesada en el sur argentino.
La noticia fue mal recibida en su momento, por parte de varios sectores corporativos que también se proyectan sobre la región, considerada una posición geoestratégica por su proximidad con el continente antártico. Esto contribuyó al despliegue de la desinformación durante los últimos meses, generando rumores acerca de la instalación de una base militar china en Ushuaia. Pero a pesar de ello, la provincia ha continuado sus avances en las negociaciones con la ratificación de este memorándum el pasado 7 de diciembre.
Acuerdos con futuro
La llegada de inversiones chinas a la isla de Tierra del Fuego ha sido motivo de especulaciones y fake-news desde hace varios años. Sin embargo, los proyectos han comenzado a definirse positivamente durante el último período, en función de distintos factores que valorizan la presencia en esta región austral: condiciones naturales favorables, infraestructura de calidad y promoción institucional.
Por su parte, el capital de origen chino se encargó de generar una propuesta de mutuo beneficio con el objetivo de mejorar su posición dentro de las negociaciones. De acuerdo con el memorándum de entendimiento, la inversión de U$S1.250 millones planificada por la Shaanxi Chemical Industry Group incluye el desarrollo de infraestructura abierta al uso compartido: una central eléctrica a base de gas natural, y una terminal portuaria con capacidad para grandes barcos.
Según lo reportado por medios especializados, la parte china se compromete además al abastecimiento prioritario del sector interno argentino, generando una transición en la compra de agroinsumos importados. Esto significa una contribución para remediar la pérdida sistemática de divisas en Argentina, uno de los factores responsables de la inflación estructural que caracteriza a la economía local.