

En muy pocos días se llevará a cabo en Hong Kong la festividad de 天后廟 (tin1 hau6 miu6).
Tiempo pasado, la vida de Hong Kong estaba muy ligada al mar, por tal motivo se erigieron construcciones muy atractivas en las cuales se venera a la diosa Tin Hua, protectora de pescadores y marineros.

Templo 天后廟- Yau Ma Tei (foto de mi autoría)
Tin Hua, es también llamada Mazu. Pero antes de convertirse en una deidad, Tin Hau tuvo su paso por el mundo de los mortales.
Esta muchacha nació en la isla Meizhou en Fujian durante la dinastía Song del Norte en el aňo 960. Su nombre era Lin Moniang y los acontecimientos que ocurrieron en su vida están marcados por verdades y leyendas. Ella era devota de la diosa de la misericordia llamada Guanyin. Se dice también que Lin Moniang practicaba la alquimia y que tenía poderes mágicos.
Cuenta la historia que un día Lin Moniang salió al mar junto a sus hermanos y padre cuando un gran tifón azotó el barco en el cual iba la familia, provocando la caída de Lin Moniang. Mientras su cuerpo entraba en trance se dice que ascendió al cielo. Lin Moniang es conocida desde entonces como Tin Hau, la Reina del Cielo y patrona de los pescadores.
El Tin Hau Festival se celebra el día 23 de tercer mes lunar. En Hong Kong la festividad se llevará a cabo entre el 25 y 29 de mayo.

Construcción del Templo 天后 para la festividad- Sai Kung (foto de mi autoría).
Durante esta festividad, los santuarios son adornados con flores de papel colocando a la estatua de la deidad en el medio. También se lleva a cabo la danza del Dragón y de León y suelen hacer también la danza del Unicornio, ya que se considera que el unicornio es una bestia guardiana y protectora. Por otra parte, en dicha festividad se puede apreciar la Opera Cantonesa la cual transmite mensajes de paz y prosperidad. Se pueden apreciar platos muy ricos y característicos de la zona como el arroz congee o unos bollos llamados cha siu baau.
Esta festividad es muy especial para el pueblo de Hong Kong y sus ciudadanos salen a la calle a disfrutar, festejar y venerar a la diosa protectora llevándole ofrendas y regalos.