Ding Liren se consagra como el primer campeón mundial de ajedrez nacido en China
El representante de la Escuela China triunfó en Kazajistán frente al favorito Ian Nepomniachtchi, tras una agónica sucesión de empates durante el mes de abril. Con esta victoria, China alcanza por primera vez el puesto más alto en el mundo del ajedrez.

Con el reciente triunfo de Ding Liren en la ciudad de Nursultán, Kazajistán, China logra alcanzar por primera vez en su historia el puesto más alto del ajedrez mundial. El gran maestro de 30 años disputó la corona del juego-ciencia contra el ruso Ian Nepomniachtchi, luego que el título quedara vacante tras la retirada de Magnus Carlsen a comienzos de 2023. Debido a la inesperada salida del campeón, los ranqueados #2 y #3 de la organización internacional FIDE se enfrentaron para determinar quién se quedaría con el primer lugar en el mundo del ajedrez.

En la competición, reseñada por especialistas y aficionados como una verdadera batalla, ambos ajedrecistas mostraron su mejor desempeño al empatar catorce veces consecutivas durante todo el mes de abril. Agotada la instancia de partidas tradicionales planteadas para el certamen, la final del mundo debió ser dirimida en cuatro rápidas de 25 minutos que consagraron campeón a Liren por una mínima diferencia de puntos.

El triunfo del ajedrecista oriental fue interpretado por la prensa internacional como un signo más de la nueva etapa en la historia global, que tiene a China como la potencia emergente. Este título, que cobró importancia geopolítica a mediados del siglo XX como resultado de las tensiones entre Estados Unidos y la Unión Soviética, era el objetivo de un plan implementado por el gobierno de China para desarrollar el deporte a nivel nacional. Fomentando la práctica “desde abajo hacia arriba”, mediante la creación de espacios públicos dedicados a su difusión entre los jóvenes, la República Popular había logrado alcanzar grandes resultados en todos los ámbitos del juego, desde el mundial femenino hasta las olimpíadas de ajedrez.

Sin embargo, incluso con el respaldo de su país y los máximos recursos disponibles, el representante de la “Escuela China”, Ding Liren, tuvo que esperar hasta la salida del célebre campeón noruego Magnus Carlsen; quien retuvo el título durante diez años y decidió retirarse de la práctica profesional sin haber sido derrotado, debido a su pérdida de interés en la escena actual del ajedrez internacional.

En declaraciones posteriores al torneo, Liren dejó trascender que esta victoria sería un título nominal hasta que lograra alcanzar el primer lugar en el ranking FIDE, acaso desafiando al noruego para regresar a la competición. Por su parte, Carlsen fue uno de los primeros en felicitar a su sucesor, el flamante 21° campeón mundial Ding Liren, asegurando que el movimiento final de su última partida le ganaba un lugar dentro de la historia del ajedrez.