Xi Jinping en el CCPIT y la importancia para Latinoamérica
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El presidente de China, Xi Jinping, reafirma el interés en promover la cooperación de las economías para impulsar un desarrollo integral abierto al mundo.

Desde el año 1952, el Consejo Chino para el Fomento del Comercio Internacional (CCPIT, por sus siglas en inglés) insiste en la promoción de intercambios económicos y comerciales, con el fin de fortalecer las relaciones entre el grande asiático y  los países interesados en distintas áreas a nivel comercial, industrial, tecnológico, entre otros. 

En el 70º aniversario del CCPIT, Xi Jinping estableció propuestas para los países y las comunidades empresariales extranjeras, debido a que estas aspiran a trabajar de manera colaborativa y buscan que la cooperación internacional tenga un papel importante en las economías de los últimos tiempos, con miras hacia un crecimiento económico sostenido, promoviendo la investigación y el desarrollo, la transferencia de conocimientos y el desarrollo global.

China, según el Global Economic Prospects del Banco Mundial (BM), se posiciona como una de las principales economías que contribuye al crecimiento mundial, seguida por la Zona euro y Estados Unidos. Esto permite ver las oportunidades hacia el desarrollo de los países emergentes, sobre todo luego de la crisis sanitaria y su proceso de recuperación económica. 

Para los países latinoamericanos, la presencia de China resulta importante para promover las inversiones en materia de infraestructura y poder cerrar brechas en los sectores de agua y saneamiento, transporte, energía, telecomunicaciones. América Latina y el Caribe necesita invertir en infraestructura aproximadamente 3.2% de su PBI al 2030, de acuerdo con el documento “La brecha de infraestructura en América Latina y el Caribe: estimación de las necesidades de inversión hasta 2030 para progresar hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible” del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Sin embargo, debe tenerse en cuenta que el país asiático ya viene interviniendo en países latinoamericanos. Por ejemplo, en el período 2010 – 2014, los países de Argentina y Brasil representaron más del 61% de los flujos de salida de inversión extranjera directa, mientras que, en el año 2020, destacaron los países de Chile, Colombia y México, según la Red Académica de América Latina y el Caribe sobre China (REDALC-China) del 2021. Si bien esto es cierto, los países de la región tienen aún retos que abordar a nivel político, económico, social, y ambiental, que se involucran con las propuestas planteadas en el 70º aniversario del CCPIT.

Por este motivo, se necesita una región consolidada, cuyos servicios públicos se enfoquen al ciudadano. Principalmente, en que los sistemas de salud global sean eficientes y logren afrontar los posibles rebrotes de COVID- 19. Además, es preciso que los países cambien de paradigma hacia un modelo económico más sostenible, promoviendo políticas públicas alineadas al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En ese punto es donde China también se involucra, para avanzar con el cumplimiento de la Agenda 2030. 

La promoción de la innovación y la generación de nuevos conocimientos es otro de los retos abordados como propuesta. Esto permite a los países en desarrollo crear nuevos negocios, impulsar el desarrollo de franquicias y promover la cooperación. No obstante, para ello, también se requiere de la voluntad política de los países que establecen relaciones con China, es decir, la promoción de una buena gobernanza

A pesar de que el crecimiento mundial se desacelere, China seguirá siendo una de las economías con mayor influencia en Latinoamérica y el mundo. Por lo tanto, se necesita de un trabajo colaborativo entre países, para seguir atrayendo oportunidades de inversión y crecimiento económico.